Al hablar del whiskey y su origen, podemos decir que este es incierto, aunque hay quien afirma que se elaboró por primera vez en China en el siglo XIII para combatir la peste bubónica. De allí, después de un largo viaje, las técnicas para destilar alcohol a partir de la cebada habrían pasado a otras partes del mundo.
¿Dónde aparece el ‘whiskey’ por primera vez?
Desde China, esta bebida habría llegado a Mesopotamia y de allí a Egipto, donde al parecer se utilizaba como ingrediente en la preparación de perfumes. Pero estas afirmaciones no cuentan con evidencias que puedan hacerlas comprobables.
Primeros registros
Es posible que los secretos para destilar esta bebida hayan llegado a los monasterios cristianos y desde allí a Irlanda, donde existe el primer escrito que menciona el whiskey y que data de 1405, aunque hay evidencias arqueológicas de destilación anteriores. En Escocia también se le nombra por primera vez en un registro de 1496. En ambas regiones se le consideraba un regalo de los dioses.
Los secretos para su destilación llegaron hasta el norte de Europa, pero lo que se elaboraba en las regiones con climas más cálidos eran los vinos, por lo que el whiskey pasó desapercibido. En cambio, en las regiones más frías del norte, donde era muy difícil la producción de vino, cobró importancia y fue fabricado por los monjes celtas.
Un texto de origen escocés que data de 1494 contiene una detallada descripción que explica los métodos que siguió el monje John Cor para fabricar lo que en la actualidad sería el volumen equivalente a 1500 botellas.
Origen del nombre
En gaélico irlandés el whiskey era llamado uisce beathadh, lo que en gaélico escocés se escribía como uisge beathay. En ambos casos, los términos significan «agua de vida» y son los antepasados etimológicos de la palabra que usamos hoy.
En otros idiomas hay palabras con un significado similar que denominan a la misma bebida, lo que habla de un tronco común. Estos son el vocablo aquavit, que fue utilizado en las regiones escandinavas, y el aqua vitae que sería el término en latín.
– Whisky o whiskey
La palabra original fue durante mucho tiempo whisky, pero cerca de 1870 el fabricado en Escocia había decaído mucho en calidad, por lo que al de origen irlandés, que era considerado muy superior, se le añadió una «e» para diferenciarlo.
En la actualidad se llama whiskey al que se fabrica el Irlanda y Estados Unidos, y whisky al que viene de Gales, Escocia, Japón y Canadá.
Antiguos usos del ‘whiskey’
En la Escocia de finales de la Edad Media se convirtió en una bebida muy popular que era obsequiada a los huéspedes y servía para calentarse durante los fríos inviernos.
Durante los siglos XVII, XVIII y XIX se utilizó con fines medicinales para tratar parálisis, cólicos, viruela y otras enfermedades. En las cirugías y extracciones dentales se usaba habitualmente para aliviar el dolor y también fue útil para embalsamar cadáveres.
El whiskey y su origen parecen ser tan antiguos como la civilización; no en balde, los monjes celtas que lo fabricaban creían que podía resucitar a los muertos.